1.2.71

Ya en la segunda mitad del siglo XX la barraca pasó a ser propiedad del señor José Segatori, empresario local que desde muy joven había trabajado en el ramo de la lana, comenzando en la prestigiosa firma de José Othacehe, Los Vascos, y estableciéndose luego independientemente.
El edificio siguió cumpliendo su función original, aunque tras la desaparición de los mercados de concentración comenzaron a establecerse cambios considerables en la comercialización de este producto.